Supongo que la cifra debe ser superior porque hay miles de salvadoreños más que han logrado vencer el covid-19 desde sus casas, con tratamiento de médicos privados y sin confirmar con tests su diagnóstico, pero lo han superado. Todos conocemos gente así, amigos, familiares, compañeros de trabajo, vecinos.
Da gusto saber de pacientes que salen a diario de los hospitales. Generan esperanza y alegría. He visto gente mayor, algunos arriba de 80 o 90 años que superan la enfermedad, que no solo vencen el covid en sí, sino el miedo, la angustia de saberse diagnosticado.
Yo creo en la intervención divina en estas recuperaciones, pero por supuesto también creo en la voluntad de las personas de recuperarse, en no darse por vencidos. Y también hay que agradecer inmensamente al personal de Salud, médicos, enfermeras, laboratoristas, motoristas de ambulancias y hasta el personal de limpieza de los hospitales que arriesgan sus vidas cada instante por atender a los pacientes, y muchas veces a costa de su vida misma.
Sí, los 11 mil recuperados son una excelente noticia pero no podemos olvidarnos que también hay centenares de fallecidos y el doble de personas enfermas. No podemos olvidar que esta enfermedad es potencialmente letal y que debemos cuidarnos al máximo, aunque los casos confirmados vayan bajando. Miremos los rebrotes en España por bajar la guardia. Que no nos suceda.